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Hermana de nuevo falso desaparecido recibe beneficios por informe Valech
En tanto, la viuda de Millas Márquez llamó ayer al gobierno para entregar antecedentes sobre el paradero de su cuerpo, el cual estaría sepultado en el cementerio de Laja.
por C. Lara, A. Pino y J. M. Wilson | 05/02/2009 - 07:37
Hijo de padre alcohólico, Pedro Gonzalo Millas Márquez (quien fue señalado por el gobierno como el quinto caso de un falso detenido desaparecido) quedó huérfano a temprana edad, cuando su padre murió por una cirrosis y luego su madre de un cáncer.
De origen humilde, vivió gran parte de su infancia en Lautaro, Novena Región. Tras la muerte de su madre, quien subsistía de la venta de verduras en la calle, se separó de sus 12 hermanos, quienes se repartieron en distintos hogares.
En su juventud Millas Márquez intentó hacer carrera como boxeador. En 1977 era obrero agrícola y simpatizante comunista cuando, según su familia, se perdió su rastro.
No obstante, no era el único calificado como víctima en su familia. Una de sus hermanas, Elia del Carmen Millas Márquez, en 2004 fue reconocida por la Comisión de Prisión Política y Tortura, que encabezó el obispo Sergio Valech. Su causa, caratulada con el número 15.079 del informe, está basada en los abusos que sufrió de parte de un uniformado en el cerro Chena de San Bernardo durante el régimen militar.
Elia Millas dice que la única información que tenía sobre la muerte de su hermano fue proporcionada por una amistad de Lautaro que le comentó que "al pobre lo mataron los militares". Desconoce los antecedentes que ponen en tela de juicio la calidad de víctima de su hermano. Aunque también cree que "hay gente que nunca estuvo detenida y se aprovecha".
VIUDA EMPLAZA AL GOBIERNO
El caso de Pedro Millas se origina en 1990, cuando el informe de la Comisión de Verdad y Reconciliación, que presidía el jurista Raúl Rettig, lo declaró como detenido desaparecido, pese a que entonces se revisó un certificado de defunción que decía lo contrario. "Fue detenido el 15 de diciembre de 1977, saliendo de su domicilio custodiado por carabineros de Lautaro. Desde entonces, estando en poder de sus aprehensores, desaparece. En 1982, desconocidos inscribieron su defunción ante el Registro Civil", dice el Informe Rettig.
Diecinueve años después, el mismo certificado de defunción es una de las principales pruebas de La Moneda para desvirtuar la calidad de víctima de Millas Márquez.
El subsecretario del Interior, Patricio Rosende, señaló que la falsa víctima falleció en un accidente ferroviario en Laja y que las versiones distintas de su viuda, Lidia Reyes (entregadas a la Comisión Rettig y a los tribunales), hacen sospechar que se trata de un caso de mala fe. En el Ejecutivo, además, comentan que su detención por carabineros fue por un hecho de violencia intrafamiliar.
No obstante, ayer la mujer emplazó al gobierno a revelar dónde está enterrado su esposo para probar que no es un desaparecido. "A mí nadie me ha informado nada. Si ellos dicen que saben su paradero deberían entregarme el cuerpo de mi marido", sostuvo ayer Lidia Reyes.
En respuesta, en La Moneda indican que existe un acta de sepultación de Millas en el cementerio de Laja. Pero se desconoce el lugar exacto.
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